La práctica de la montaña en Mindfulness es una meditación perteneciente a las prácticas llamadas metáforas de la mente. Nos ayuda poco a poco a instaurar en nosotros el equilibrio, la ecuanimidad, la calma y la fuerza interior. Nos ayuda en definitiva a cultivar la Presencia plena en nuestra vida.

Como base de la guía de meditación utilizamos la imagen de la montaña como metáfora de nuestro Yo más profundo por sus cualidades de estabilidad, serenidad, solidez y atemporalidad. Una vez arraigada mediante la visualización nuestra parte física, los pensamientos y las emociones son equiparadas al paso de las estaciones con sus variaciones de clima. La sensación de impertubabilidad se nos plantea en la práctica con la simulación del paso de los minutos, horas y días. Frente a todo lo que acontece, permanece siempre el espíritu de la montaña, nuestro Ser.